Cada dos años, la Ciudad Condal acoge la feria del libro, LIBER, acontecimiento que se reparte con Madrid, que lo celebra los años impares. Las dos capitales españolas, en sana competencia con sus hermanas de Hispanoamérica —Guadalajara, Bogotá y Buenos Aires—, buscan cada bienio estar a la última en cuanto a innovaciones técnicas y culturales del sector editorial, cuya baza relevante es el idioma común. Esto, como saben muy bien en Barcelona, convierte a la ciudad en trampolín de la edición en español para todo el mundo.
Este año, Liber 24, que tiene lugar entre el 1, 2 y 3 de octubre en el recinto Feria Gran Vía, acogerá a más de 600 profesionales invitados de 65 países y en torno a unos 7.000 visitantes, quienes comprobarán in situ que la internacionalización del libro en español, junto a su industria editorial, va más allá y se posiciona en nuevos mercados literarios.
Hagamos un ligero repaso de las actividades que se han planificado para poder corroborar que el optimismo expuesto tiene razones firmes, aunque lo más apropiado sería visitar por ahora —y antes de ir presencialmente al recinto— el programa en la web: https://www.liber.es/programa/ Así, de entrada, nos encontraremos con una presentación sobre los ‘Programas de promoción y lectura en los centros educativos’, con mesas redondas en torno a la ‘Traducción y sostenibilidad del libro’, además de otras sobre ‘Redes sociales…’ Habrá también dos encuentros ‘Entre editores y agentes literarios’, se explicará en qué consiste la renovación del ISBN y el DILVE, asistiremos a una mesa redonda sobre la ‘Cooperación entre China-España’ (¿hasta dónde alcanza, más allá de que se imprime más barato en el país asiático?). Y no faltará, por supuesto, conversar y exponer el «tema» más pertinente durante estos días: ‘Inteligencia artificial y sector editorial: ¿cómo monetizar tus obras’. Puede que esta mesa redonda «eche fuego» cuando se adentre en los terrenos de la propiedad intelectual y la ética editorial. Y así hasta unos setenta eventos/comunicaciones/actos. Apuntamos cuatro más, para no agobiar: 1) el ‘talking books’ en la producción de audiolibros con voces clonadas; 2) el apoyo al sector editorial, por la tendencia de algunos gobiernos de dopar la industria 3) la fiesta-entrega de premios a los libros mejor editados… por aquello de que «para gustos colores»; o 4) los aspectos medioambientales del papel, la materia prima que no deja de subir sus precios pero no para de innovar.
Estas temáticas editoriales —y las restantes del programa de Liber 24— nos mostrarán sin duda el pulso de un sector con verdadero músculo, diga lo que diga el pusilánime de turno. Algo que, con mayor o menor voracidad intelectual y técnica, los futuros profesionales de la edición podrán convertir en herramientas útiles para su desarrollo individual y empresarial, y más si desean aplicar sus energías en la aventura que puede suponer lanzar un sello editorial propio.
Los alumnos del Máster en Edición 24-25 están invitados a escoger unos cuantos eventos y absorberlos para su beneficio. Solo tiene que acceder a la web y acreditarse.